La condición fibroquística
Las mamas fibroquísticas están compuestas de tejido que puede tener una textura grumosa o parecida a una cuerda. Los médicos lo denominan «tejido mamario nodular o glandular».
No es poco frecuente tener mamas fibroquísticas. Más de la mitad de las mujeres experimentan cambios fibroquísticos en las mamas en algún momento de sus vidas. De hecho, los profesionales médicos han dejado de usar el término «enfermedad de mama fibroquística» y ahora simplemente la denominan «mama fibroquística» o «cambios fibroquísticos en las mamas» porque la mama fibroquística, en realidad, no es una enfermedad. Los cambios en la mama clasificados como «fibroquísticos» se consideran normales.
Aunque muchas mujeres con mamas fibroquísticas no tienen síntomas, algunas mujeres experimentan dolor en las mamas, sensibilidad y nudosidad, en especial, en la zona superior exterior de las mamas. Los síntomas en las mamas tienden a ser más molestos justo antes de la menstruación. Las medidas de cuidado personal simples, generalmente, alivian las molestias asociadas con las mamas fibroquísticas.
Síntomas
Los signos y síntomas de los senos fibroquísticos pueden comprender:
- Nódulos mamarios o áreas de engrosamiento que tienden a mezclarse con el tejido mamario de alrededor.
- Dolor de mamas generalizado o sensibilidad
- Nódulos mamarios que cambian de tamaño con el ciclo menstrual
- Secreción por el pezón verde o marrón oscuro sin sangre que tiende a salir sin que se presione ni oprima.
- Cambios en las mamas que son similares en ambos senos.
- Mayor nudosidad o dolor en las mamas todos los meses, desde la mitad del ciclo (ovulación) hasta justo antes del período menstrual.
Los cambios de los senos fibroquísticos ocurren con mayor frecuencia en mujeres de entre 20 y 60 años. En raras ocasiones, las mujeres posmenopáusicas experimentan cambios en los senos fibroquísticos, a menos que se encuentren bajo una terapia hormonal.
Cuándo consultar al médico
La mayoría de los cambios de los senos fibroquísticos son normales. Sin embargo, pide una consulta con tu médico si:
- Descubres un nuevo nódulo mamario o un área con un engrosamiento prominente.
- Tienes áreas específicas de dolor de mamas continuo o que empeora.
- Los cambios en las mamas continúan luego del período menstrual.
- Tu médico evaluó un nódulo mamario pero ahora parece estar más grande o de otro modo diferente.